
El arroyo Salado, llamado arroyo Júcar en su cabecera, transcurre por zonas de incalculable valor medio ambiental.
Encontramos allí todas las especies vegetales protegidas propias del Parque, algunas ocupando un lugar que no les corresponde, como es el caso de los enebros. En cuanto a los animales, las buitreras merecen una mención especial y, por último, en el aspecto geológico destacamos la presencia de grandes lajas espuestas al sol y a los vientos llamadas flish, que cobijan en sus grietas pequeñas plantas muy adaptadas a estas condiciones tan extremas.
Las fincas, públicas o privadas, por las que cruza son zonas muy protegidas por lo que es indispensable contar con los consiguientes permisos y extremar todas las precauciones de respeto a la naturaleza.
Las fincas, públicas o privadas, por las que cruza son zonas muy protegidas por lo que es indispensable contar con los consiguientes permisos y extremar todas las precauciones de respeto a la naturaleza.
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